Tu donación de Q100 mensuales traerá esperanza y cambios a la vida y comunidad de tu niño apadrinado. A través de tu patrocinio, Food for the Hungry Guatemala podrá ayudar a toda su comunidad proporcionando alimentos, capacitaciones culinarias y pecuarias, una mejor educación, agua limpia y ayuda en tiempos de crisis. Elige a un niño o niña para apadrinar y luego llena el formulario que aparecerá.
Deseamos crear relaciones que motiven y den fuerza y ánimo a la niñez que vive en situación vulnerable. ¡Bien hecho! Gracias por tu deseo de apoyar.
Tiene 6 años, le gusta escuchar música, su clase favorita es de dibujo.
Por las tardes le gusta ayuda a limpiar su casa.
Tiene 6 años, le gusta jugar fútbol, su clase favorita es dibujo.
En las tardes ayuda a cuidar a sus mascotas.
Tiene 8 años, le gusta jugar fútbol, su clase favorita es dibujo.
En las tardes ayuda a buscar leña.
Tiene 8 años, le gusta jugar fútbol, su clase favorita es dibujo.
En las tardes ayuda a barrer en casa.
Tiene 8 años, le gusta jugar fútbol, su clase favorita es matemáticas.
En las tardes ayuda a barrer en casa.
Tiene 7 años, le gusta jugar fútbol, su clase favorita es dibujo.
En las tardes ayuda a barrer en casa.
Tiene 7 años, le gusta jugar muñecas, su clase favorita es matemáticas.
En las tardes ayuda a barrer en casa.
Tiene 8 años, le gusta jugar fútbol, su clase favorita es dibujo.
En las tardes ayuda a barrer en casa.
Tiene 8 años, le gusta correr, su clase favorita es dibujo.
En las tardes le gusta ayudar a cuidar a sus mascotas.
Tiene 7 años, le gusta jugar escondite, su clase favorita es Español.
En las tardes ayuda a barrer su casa.
Tiene 8 años, le gusta jugar muñecas, su clase favorita es de dibujo.
En las tardes ayuda a barrer su casa.
Tiene 7 años, le gusta jugar muñecas, su clase favorita es Español.
En las tardes ayuda a lavar trastos en su casa.
Creemos que cuando una comunidad está equipada para cuidar a sus miembros más vulnerables, todos son cuidados y se elimina la pobreza. Por eso que buscamos desarrollar comunidades – enfocándonos en los niños. Uno de los indicadores más importantes de que las familias, las iglesias y los líderes comunitarios están haciendo un buen trabajo, se ve reflejado en el bienestar de sus niños. Cuando equipamos a las comunidades con las herramientas y los recursos que necesitan para cuidar a sus propios hijos, las capacitamos para que inviertan en su propio desarrollo.